Toma de avance

La toma de avance se utiliza para monitorear y registrar el progreso real de las tareas de un proyecto en comparación con el plan establecido, y permite a los equipos de proyecto identificar y abordar cualquier desviación o retraso en la ejecución del trabajo.


Durante la semana de ejecución, los trabajadores llevan a cabo las tareas asignadas y registran el progreso real de su trabajo. Esto implica la actualización de la información de avance en un tablero o sistema visual, en el cual se registra el estado de las tareas, si están completadas, en progreso o retrasadas.


Al final de cada semana, se lleva a cabo una reunión de Toma de Avance en la que se registra el avance real de las tareas en comparación con el plan establecido. Se analiza el desempeño del proyecto en términos de cumplimiento de los compromisos de finalización de tareas y se identifican las causas de los retrasos o desviaciones.